¿Qué se busca en un directivo? III Parte
A continuación compartimos la tercera parte del artículo ¿Qué se busca en un directivo? de nuestro docente Carlos López Navaza, socio-director de López Navaza Asociados Consultores S.L y asesor de varias empresas en las áreas de estrategia, negocio y energía.
Espero que recordéis mis anteriores artículos con este mismo título; en otro caso, os animo a que los releáis. La necesidad de hacer una continuación del mismo viene dada por los comentarios que muchos de vosotros me habéis hecho llegar. Muchas gracias por ello.
Dentro de estos comentarios, había bastantes que señalaban algunas cuestiones que deberían haberse incluido en el artículo. Por supuesto tienen razón, así que he decidido escribir este nuevo artículo para complementar el anterior e intentar cubrir alguna de las carencias señaladas.
Todos los comentarios y opiniones que me habéis hecho llegar, las he condensado en dos aspectos relevantes: primero, la imposibilidad de que un directivo tenga todas las características señaladas y, por tanto, ¿cuáles han de ser las más necesarias?; y, segundo, en la selección de un directivo o un profesional de alto nivel, ¿deberían incluirse en la selección, las referencias?
Veamos cada uno de estos apartados:
Respecto al primero, es evidente que nunca se pueden tener todas las características personales y profesionales que señalábamos, en un alto grado. Por tanto, es necesario determinar cuáles han de ser las más necesarias y qué valor mínimo ha de alcanzar en cada una de éstas.
Precisamente son estos dos aspectos, priorización de características y valores recomendados de las mismas, los que ha de definir la empresa de selección en consonancia con la empresa que demanda el directivo.
Por ello, el proceso de selección que a los profanos nos puede parecer una actividad sencilla, no es tal, y exige un conocimiento y unas destrezas elevadas.
Pero ¿de qué depende el orden de las características exigidas para un puesto definido y cuáles son los valores de referencia que han de alcanzar?
La respuesta, con carácter general, es que dependerá del tipo de empresa, de la situación de ésta y de la posición que el directivo va a ocupar en la estructura organizativa de la misma, por ejemplo, no es lo mismo las características necesarias para un Director General, que para un Director Financiero, etc.
En lo referente al tipo de empresa, además de su volumen de facturación, plantilla, sector, etc., es relevante la cultura de la misma: burocratizada, ágil, paternalista, jerarquizada, etc.
En cuanto a la situación, no se necesita el mismo perfil de directivo para una empresa en una situación económica difícil, que, en una boyante, una empresa estabilizada, que una para desarrollar, etc.
Por último, las exigencias del puesto de trabajo y sus competencias, ayudarán a definir el orden y el peso de las características profesionales y personales del candidato a desempeñarlo.
Como veis, hay un compendio de factores de la empresa y el puesto que a los encargados de la selección les determinará las características que ha de tener el candidato.
En cuanto al segundo punto, las REFERENCIAS, tenéis razón de que complementan a las tres formas por mí señaladas de selección: currículum, pruebas y entrevistas.
Vamos con ellas:
Creo que las referencias se pueden clasificar en dos tipos: las recomendaciones y las pesquisas.
La propia definición de recomendación de la Real Academia de la Lengua: “Alabanza o elogio de alguien para introducirlo con otra persona”, denota que se va a magnificar las cualidades de la persona, de ahí el cuidado que hay que tener a la hora de valorarlas.
No obstante, es una fuente importante de búsqueda de profesionales y directivos.
Las recomendaciones provienen principalmente de amigos o conocidos y de compañeros de trabajo. Incluso en algunas empresas se promueve y se valora a los profesionales y directivos de la misma que recomienden a otros para su posible incorporación.
En este mismo capítulo encajan también las denominadas cartas de RECOMENDACIÓN, muchas de ellas emitidas y firmadas por personas que previamente han prescindido de los servicios del recomendado. Extraña paradoja.
En cuanto a las pesquisas, si recurrimos también a la definición que da la RAE: “Información o indagación que se hace de algo para averiguar la realidad de ello o sus circunstancias”, vemos que se trata de un aspecto relevante a tener en cuenta en la selección de personal, y especialmente, en la de directivos, ya que se trata de encontrar información real sobre aspectos de su personalidad o su profesionalidad. Pero ¿dónde encontramos esta información?
Desde hace años, en los procesos de selección se utilizan diferentes fuentes, habitualmente se dirigen las pesquisas a personas que hayan tenido relación con el candidato, así se contacta con antiguos jefes, compañeros, colaboradores, etc.
En la actualidad esta búsqueda continua vigente, pero se complementa con otra fuente que va adquiriendo gran protagonismo y que será cada día más relevante, las redes sociales.
Todo lo que incluimos en las redes sociales queda expuesto a la vista de todos y se expande rápidamente. De estos elementos expuestos se deducirán muchas de nuestras características personales y profesionales que, por supuesto, tendrán una especial significación en el proceso de selección, impactando de manera positiva o negativa en el responsable del proceso.
Permitidme una recomendación, que cuidéis vuestras relaciones y vuestra actuación en las redes sociales, ya que pueden, y cada vez con mayor probabilidad, tener una gran incidencia en nuestra vida profesional, e incluso, personal. Recordad, impacto positivo y negativo. Intentemos exagerar lo menos posible en ellas y hacer un buen uso profesional.
Os animo a que seáis críticos con esta lectura. Yo me comprometo a hacer un nuevo artículo con vuestras sugerencias.Gracias.
Carlos López Navaza
Socio-director de Lopez Navaza&Asociados Consultores S.L. y consejero de diversas empresas en las áreas de estrategia, negocio y energía, y colaborador en diversas escuelas de negocios en las materias de Estrategia, Planificación y Control y Organización de Empresas. Además es profesor asociado de Galicia Business School.